Formaron una de las parejas más ideales de star system adolescente de los últimos años; luego dejaron de serlo, protagonizando una tortuosa relación de idas y venidas que no hacía bien a ninguno de los dos; y finalmente parecía que habían conseguido ser dos ex muy bien avenidos. Hasta este sábado, cuando se han declarado la guerra de manera pública. Pero vayamos por partes.

Fue Justin el primero en dar el primer paso: “Voy a hacer privada mi cuenta si no paran el odio. Esto se está saliendo de control. Si fueran fans verdaderos, no serían crueles con gente que me gusta”, escribía el cantante canadiense en Instagram en referencia a las críticas que sus fans han vertido en las redes sobre su nueva novia, Sofia Richie (hija del cantante Lionel Richie).

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La reacción de sus seguidores y seguidoras vino en forma del hashtag #RipBeliebers, que sirvió como toque de atención al artista. 

Aunque la que nadie esperaba era la de Selena Gómez, que no dudó en dar su opinión sobre el asunto: “Si no puedes con el odio, entonces deja de subir fotos con tu novia. Lo que tienen debería ser algo especial solo entre tú y ella. No te enfades con tus fans, ellos te han apoyado siempre”, le contestaba la ex chica Disney en Instagram.

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“Es curioso cómo alguien que me ha usado para llamar la atención sobre ella lo siga haciendo de nuevo y de la misma manera”, eran nuevamente las palabras de Justin.

Vaya problema. La cosa ha terminado (de momento) con el hashtag #SelenaEndedJustinParty (que viene a significar que Selena le ha fastidiado la fiesta a Justin) y con un collage que la cantante ha colgado con algunos de sus fans. “Toda mi vida. Serán lo que más me importa. Gracias por dejarme hacer lo me gusta cada día”, es el mensaje que acompaña a la imagen. Una indirecta muy directa. 

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Fotos: Gtres e Instagram